Diario de Navarra 16.02.08
ENTRE LOS MÁS AFECTADOS SE ENCUENTRAN LOS VALLES DE AGUILAR, LA BERRUEZA, VALDEGA Y LA SOLANA.
Diecisiete representantes municipales de la zona abordaron ayer el tema en Aguilar de Codés.
La posibilidad de que una línea de alta tensión cruce el suroeste de Tierra Estella en 2010 ha suscitado la alarma entre la población de la zona. Aunque, la empresa promotora, Red Eléctrica de España, todavía no ha hecho público el trayecto concreto que llevará esta infraestructura por la comarca, sí ha facilitado posibles direcciones que han levantado las críticas de los ayuntamientos afectados pidiendo el cambio de trazado.Entre ellos se encuentran el valle de Aguilar, Valdega, La Berrueza, Allín e incluso La Solana. Diecisiete representantes municipales de las tres primeras zonas -Cabredo, La Población-Meano, Azuelo, Torralba, Espronceda, Desojo, Sansol, El Busto, Aguilar de Codés y Mirafuentes- mantuvieron ayer una reunión a las siete de la tarde en el consistorio de Aguilar de Codés para tratar la problemática y establecer nuevas líneas de protesta, como la creación de una junta gestora.
La situación, la trasladaron hace ya un mes al Gobierno de Navarra y al Ministerio de Medio Ambiente a través de una alegación que capitaneó Teder y a la que se adhirieron 54 ayuntamientos de la zona y entidades como la Mancomunidad de Montejurra, el Consorcio Turístico de Tierra Estella, la Asociación de Truficultores de Tierra Estella y Ecologistas en Acción.
Todos ellos suscribieron la voluntad de que se replantee el recorrido de esta línea de 400kV -las de máxima capacidad en España-, que pretende comunicar Vitoria con Muruarte de Reta (comarca de Pamplona). Esta futura infraestructura de red garantizaría la estabilidad del sistema eléctrico a nivel estatal, un precio que argumentan como demasiado caro teniendo en cuenta que no existe posibilidad de aprovechamiento en la zona y conlleva una larga lista de aspectos negativos.
Ayer, se pudieron de nuevo sobre la mesa muchos de los que describieron en el documento que remitieron a las instituciones competentes. Argumentan que la instalación de esta línea supondría caminar en contra del modelo territorial, que alude al patrimonio natural y cultural como característica principal de la zona. A este razonamiento de impacto ambiental sumaron la vulnerabilidad del desarrollo socio económico y turístico, que suscribió la alcaldesa de Aguilar de Codés, Amparo Labeaga Díaz de Cerio. "Confiamos en que el proyecto se desestime porque supondría una vuelta atrás en materia turística, sin hablar del impacto visual que conllevarían unas torres de 45 metros y la incidencia en la salud de los habitantes", comentó.
Amparo hizo hincapié en la necesidad de hacer ahora públicas las quejas para evitar que las generaciones venideras se encuentren con un problema sin solución. "El potencial de la zona es la naturaleza. Así como no construyen carreteras ni autovías, no queremos que nos coloquen esta autopista eléctrica que no nos sirve para nada", consideró.
