El correo 11-6-2010
Navarra siembra dudas sobre el pacto para desviar la red de alta tensión
El Gobierno foral se desmarca del acuerdo alcanzado en la Cámara vasca y exige negociar con Red Eléctrica una alternativa a la línea Castejón-Vitoria
VOTACIÓN DE AYER
A FAVOR
PNV, PSE, PP y UPyD apoyaron la decisión de instar al Gobierno vasco que pida a Madrid retirar la línea por la Montaña
EN CONTRA
Aralar mostró su oposición a la alta tensión y EB se preguntó por qué hay que poner en marcha la red de 400 kV.
El acuerdo para que la red de alta tensión no pase por la Montaña Alavesa encontró ayer un imprevisto obstáculo. Por la mañana, el Parlamento vasco aprobaba, con el voto favorable de la mayoría de los partidos políticos, instar al Gobierno de Patxi López que proponga al Ministerio de Industria que se olvide de la línea de 400kV entre Castejón, Muruarte y Vitoria a través de la Montaña. Horas después, el Ejecutivo navarro marca distancias frente a las decisiones adoptadas en el País Vasco y exigía negociar con Red Eléctrica Española (REE) cualquier propuesta alternativa sobre el trazado de alta tensión.
La vuelta de tuerca del Gobierno de Miguel Sanz vuelve a sembrar de dudas, por tanto, el cambio de trazado de la polémica línea, que todos los partidos políticos, ayuntamientos, cuadrillas y ecologistas alaveses habían aplaudido de forma unánime. Y es que el Departamento de Innovación, Empresa y Empleo de la Comunidad foral asegura que las decisiones referidas a este proyecto que afectan a Navarra «deben ser adoptados por el Gobierno y los principales partidos políticos» navarros. Y los acuerdos alcanzados en la Cámara vasca, como el de ayer, «deben quedar al margen» de las actuaciones en Navarra.
El Gabinete de Sanz admite haber iniciado «conversaciones preliminares» con REE, pero, aclara, no se han introducido cambios en el proyecto oficial que se mantiene en tramitación administrativa por parte del Ministerio, que es la línea Tafalla-Vitoria.
Navarra fija «tres condiciones básicas» para llegar a un pacto sobre la línea de alta tensión. La primera, conseguir una mejora «importante» del suministro y evacuación de electricidad a la Merindad de Estella mediante la instalación de una subestación en la zona. El segundo requerimiento es tener un incremento «sustancial» de la capacidad de evacuación de energía del sistema eléctrico a través de la red de alta tensión. Y por último, quiere modernizar el suministro eléctrico de la zona de La Barranca. Estas condiciones todavía no han sido asumidas por Red Eléctrica.
El debate
Ajenos a esta polémica, por la mañana en la sede del Parlamento vasco representantes de los diferentes partidos debatieron una moción del PNV para que la red de alta tensión se desvíe de la Montaña alavesa y, basándose en la propuesta Biok de los jeltzales, discurra por Orcoyen y Dicastillo, en Navarra, aprovechando el corredor de infraestructuras ya existente que discurre por la autovía A-12.
PSE, PP y UPyD respaldaron la iniciativa peneuvista, a la que se sumó EA, aunque no pudo participar en la votación. Mientras que Aralar y EB se abstuvieron. Javier Carro (PNV) cree que Biok dará «mayor estabilidad» al transporte de energía y una «mejor evacuación» en la zona de influencia. Su planteamiento fue apoyado por Natalia Rojo (PSE), para quien el proyecto que finalmente se lleve a cabo «debe defender el medio ambiente». También la popular Laura Garrido expresó su satisfacción por el consenso: «La posición del PP, en todas las instituciones, fue rechazar los trazados elegidos por sus afecciones medioambientales». Gorka Maneiro (UPyD) defendió el acuerdo, que «posibilita minimizar al máximo los daños naturales».
Las voces discordantes llegaron de Dani Maeztu y Mikel Arana. El primero (Aralar) rechazó que se acepte la alta tensión y señaló que el debate debía centrarse en el «modelo energético que queremos». Al segundo (EB) no le convence la propuesta Biok y se preguntó «por qué hay que poner en marcha esta red» de 400kV