SEIS CONSISTORIOS DE TIERRA ESTELLA SE INCLUYEN ENTRE LOS MIEMBROS
Critica las afecciones que producirá un pasillo de 110 kilómetros de longitud por 26 metros de anchura
Una plataforma compuesta por ayuntamientos y grupos ecologistas y sociales luchará contra el proyecto de instalación de la línea de alta tensión prevista por el Ministerio de Industria para unir las subestaciones de Castejón y Muruarte de Reta con Vitoria y que cruzará Tierra Estella. Esta organización nace con el fin de hacer entender a políticos y ciudadanos la premisa de que "esta línea no es necesaria" y de informar de todas las consecuencias que pueden conllevar los 110 kilómetros de tendido eléctrico.Critica las afecciones que producirá un pasillo de 110 kilómetros de longitud por 26 metros de anchura
Por el momento, seis localidades de Tierra Estella (Marañón, Aguilar, Cabredo, Oco, Torralba del Río y Genevilla) ya se han sumado a la plataforma y como explica Alberto Frías, portavoz del colectivo ecologista Eguzki, está abierto a todos los consistorios y grupos que quieran sumarse. También están inscritos los gaztetxes de Lizarra y Mirafuentes, y el grupo Ecologistas en Acción-Ekologistak Martxan. La organización a partir de la que se ha gestado este proyecto es el colectivo ecologista alavés Eguzki que presentó ayer oficialmente la plataforma en Vitoria y que el próximo martes lo hará en Pamplona.
La entidad, denominada Plataforma contra la línea de alta tensión-Autopista elektrikorik?, ez, ya cuenta con las principales bases de oposición a este proyecto y remarcan que no es necesaria. "La justificación de la línea de alta tensión es evacuar la producción energética, con proyectos como la central térmica de Lantarón o la ampliación de la de Castejón y las nuevas centrales eólicas Cruz de Alda e Iturrieta, proyectos que cuentan con una gran contestación popular y a los que también mostramos nuestra oposición".
MEDIO AMBIENTE Y SALUD La plataforma también remarca el impacto ambiental. "En un pasillo de 110 kilómetros de largo y 26 metros de ancho debe desaparecer todo, lo que conlleva talas masivas". En cuanto a los aspectos sanitarios, esta plataforma explica que, además del ruido, los campos electromagnéticos suponen un grave riesgo para la salud. "Distintos estudios revelan la aparición de síntomas como el trastorno del sueño, fatigas crónicas, pérdidas de memoria o cefaleas en los adultos, ciertos tipos de cáncer y leucemia ya que el riesgo de contraerla es cuatro veces superior al considerado normal", explican. Los otros dos puntos de reflexión se refieren a las actividades agrarias y económicas que se pueden ver afectadas como las denominaciones de origen o la capacidad turística de las zonas por las que transcurre, como el Camino de Santiago y el Ferrocarril Vasco-Navarro.
A partir de ahora, este grupo comenzará a marcar las actuaciones a seguir. "De momento, se ha propuesto la creación de pancartas, mapas de la línea gigantes o recogida de firmas, pero todavía está sin concretar", señala Alberto Frías.
Por el momento, la contestación política a esta línea no satisface a los miembros de la plataforma que ven, entre otras trabas, la escasa comunicación entre la Diputación de Álava y el Gobierno de Navarra, y las alternativas que éstos proponen y que no solucionan el problema.El lunes, cinco grupos políticos de las Juntas Generales de Álava, Nacionalistas Vascos, Grupo Popular, Mixto-Aralar, EA y Ezker Batua, mostraron su total oposición al proyecto de la línea eléctrica mediante una moción que no firmaron los socialistas vascos.